Reseña “Viviendo con el lobo”, de May Acosta

Viviendo con el lobo: Rendirme jamás será una opción (2022) es un relato valiente escrito en primera persona. Es sincero, emocional, dramático y sobre todo, muy honesto.
En su ópera prima, la escritora, conferencista y publicista venezolana May Acosta decidió contar su propia historia. Un relato positivo sobre el padecimiento de una enfermedad en el que sus palabras son una luz en medio de la adversidad.
Este libro obtuvo el 1er lugar en el primer concurso literario Letras que inspiran el futuro (2022) organizado por la casa editorial PanHouse.
El texto está estructurado en seis partes y cada una tiene capítulos cortos autobiográficos bien estructurados.
Pese a su sencillez y facilidad para leer, encierra una gran profundidad en su mensaje que el lector agradecerá.
Todo comienza con una joven responsable, sacrificada, estudiosa y con una bella familia que comienza a padecer síntomas que nunca imaginó tener.
El dolor seguía y nada mejoraba, se seguían sumando más síntomas a la larga lista que venía padeciendo y yo no sabía qué hacer.” (pág.26)
La escritora deja de manifiesto la importancia del apoyo familiar en su particular situación.
Viviendo con el lobo: Rendirme jamás será una opción es un testimonio que detalla paso a paso cómo la incertidumbre en la búsqueda de un especialista médico, la llevó por caminos errados, experimentales y que no hicieron más que retrasar el verdadero diagnóstico.
Sin duda fue un error, si sientes que tu cuerpo no está bien, él te lo hará saber, solo escúchalo, no desistas, sigue intentando buscar una respuesta hasta que la consigas.” (pág.29)
May Acosta quiere dejar un relato a modo de enseñanza sobre lo que podría sufrir cualquier persona que enfrente una enfermedad autoinmune. Ella nos transmite un importante mensaje sobre fuerza de voluntad como forma de superar las adversidades.
¿Qué me estaba pasando?, me pregunté con angustia ¡¿Cómo era posible que nadie pudiese diagnosticarme correctamente?!” (pág.51)
En su transitar, encontró mucha incomprensión e insensibilidad en profesores, médicos e inclusive en su lugar de trabajo. Además de enfrentar a gente que cree saber sobre las enfermedades y opinar a la ligera, muchas veces con saña.
El mundo se ha llenado de personas insensibles, la empatía cada día va perdiendo fuerza y con ella mi fe en la humanidad, es necesario colocarnos en los zapatos de los demás antes de juzgar su camino, sino nada tiene sentido.” (pág.35)
Su familia fue el mejor apoyo que pudo con su enfermedad. El amor y la comprensión de los suyos, hizo que afrontara de una mejor manera lo terrible de su padecimiento.
El miedo era un enemigo a vencer, así como la culpa. May se llega a cuestionar hasta qué punto, actuar de otra manera hubiese cambiado ese diagnóstico.
Ella deja bien en claro que las búsquedas en Internet deben hacerse cuidadosamente porque pueden encender alarmas innecesarias. Y eso puede generar mayor angustia en vez de ayudar.
Dolorosas experiencias hacen que, al fin, tenga el diagnóstico acertado sobre su padecimiento.
Enmudecí por completo y me quedé sin aliento, no tenía una sino ¡dos enfermedades! ¡Dos!… Sentí que mis piernas flaqueaban, tenía miedo.” (págs.68-69)
El lupus significaba lobo y May había decidido convivir con él, así como con la artritis reumatoide.
Comencé a acariciarlo, como queriendo ganarme su confianza, le ofrecí una rosa roja como ofrenda de paz.” (pág.72)
May comenzó a estudiar a fondo su enfermedad y siguió los tratamientos al pie de la letra.
Entendió que tenía que vivir con esa dolencia que actuaba a veces en silencio y otras, manifestando síntomas muy dolorosos.
Ella también entendió que su misión podía ser, ayudar a personas con enfermedades crónicas para que aprendieran a aceptar.
Escribir sobre el “lobito”, como ella había apodado a su enfermedad, le permitió ayudar a los demás y sentirse mejor.
Sin embargo, la escritora tiene la valentía de reconocer en este relato muy humano, que llegó a flaquear al ser desordenada con su tratamiento, lo que le valió una severa advertencia médica y una toma de conciencia para hacerlo bien. Su vida estaba en juego.
Ella ha padecido innumerables momentos de dolor y tiene su propia posición en torno a ello.
En ese instante pensé que a veces somos capaces de soportar mucho dolor, pero solo depende de nosotros recordarlo con sufrimiento o transformarlo en una experiencia que nos haga más fuerte. Yo elegí la segunda opción.” (pág. 92)
Su experiencia cercana a la muerte la hizo reflexionar sobre el camino que debía seguir su vida, la acercó más a la lucha por sus sueños y le enseñó a que no se puede estar a disgusto en un lugar porque siempre puede haber una mejor oportunidad.
Una de las partes más emotivas Viviendo con el lobo: Rendirme jamás será una opción es cuando recibe una noticia que lo cambia todo. Está embarazada, el embarazo es vida, pero en su caso ¿Qué representaba? Aumentaron sus temores a que el lobito pueda manifestarse y hacerle daño al bebé.
Contra viento y marea, a pesar de todos los pronósticos fatalistas, May y Alfred transitaron el camino del embarazo apoyándose mutuamente sin olvidar el riesgo que habían decidido correr.
En un mundo de tanta desinformación, el libro de May Acosta puede servir de guía y evitar el perder el tiempo desde un comienzo. Un mensaje veraz, aleccionador e imprescindible.
Soltar los miedos y aferrarse a la vida es el principal mensaje de May Acosta en Viviendo con el lobo, ella supo combinar su pasión por la escritura con su historia personal. La escritora se ha desahogado y quiere que el mundo conozca lo que significa convivir con enfermedades crónicas.
Vivir con una enfermedad autoinmune es aceptar que nuestra vida no será totalmente normal y que habrá días buenos y otros no tanto, pero depende de nosotros hacerlos inigualables.” (pág.120)
Rendirse nunca fue ni será una opción.
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Viviendo con el lobo: Rendirme jamás será una opción
Editorial: PanHouse
Colección: autoayuda emociones, motivación autoayuda
Páginas: 122
May Acosta
Publicista, escritora y conferencista. Autora del libro Viviendo con el lobo con el que resultó ganadora del primer lugar del Concurso Literario Letras que inspiran el futuro convocado por la Casa editorial PanHouse en Venezuela.
Se define a sí misma cómo una eterna aprendiz, amante de la vida y una soñadora empedernida que aprendió a vivir con los lobos y a transformarlos en oportunidades.
Patricia Chung
2 Comments
Dionis
atAl parecer muy bueno. Ayudará a muchas personas , Sería recomendable para la autora y otras personas estudiar libros como El placebo eres tu;del Dr Joe Dispensa
queleerblog
atGracias por la recomendación Dionis 🙂